Hace un año ya, en abril de 2012,
Editorial Ivrea renovaba parte de su catálogo manga con una serie de licencias bastante demandadas por los lectores. Entre esa batería de nuevos títulos se encontraban series tan demandadas como
Deadman Wonderland,
Medaka Box,
Mirai Nikki o
Elfen Lied entre otras. Entre las nuevas licencias se encontraba
Sundome, un título no tan esperado como los anteriores aunque resultó ser una inesperada sorpresa para los lectores, que veían como la editorial nutria con nuevos títulos su catálogo manga
seinen.
Kazuto Okada es el autor de esta historia erótica que navega entre las aguas del drama, la comedia y el romance. Este
seinen fue publicado entre 2006 y 2008 en la revista
Young Champion de la editorial
Akita Shoten, magazín que ha dado cobijo a títulos reconocidos como
Alien Nine,
Battle Royale,
Love Junkies o
Young Black Jack. La serie fue recopilada finalmente en su país de origen con un total de 8 tomos.
Aunque la historia no contó con una adaptación animada, si que ha servido de inspiración para un
live-action. Una serie de cuatro películas de imagen real llevarían la historia de
Hideo y
Kurumi a la gran pantalla. La primera de las cuatro películas se estrenaría en la cartelera de las salas de cine niponas el 20 de noviembre de 2007. El resto de las diferentes entregas se irían sucediendo con una diferencia de medio año a excepción de la cuarta y última, que no se estrenaría hasta noviembre de 2009. Todas ellas fueron dirigidas por Daigo Udagawa, quien además se ocupó de ayudar escribir el guión.
ArgumentoHideo Aiba, un estudiante más de 15 años acude un día más a la rutina diaria de asistir a clase.
Aiba se caracteriza por ser una persona callada y tímida que no suele acercarse mucho a sus compañeros de clase. Tanto que su presencia para los demás se considera por los demás insignificante e irrelevante. Tampoco ayuda mucho el que sea miembro del
Roman Club, club integrado por
frikis y fetichistas que pasan su tiempo cultivando sus pasiones y se mantienen alejados y a salvo del mundo real.
Lo que no espera el pobre de
Hideo es que su nueva compañera de clase recién transferida esa misma mañana,
Kurumi Sahana, marcará un antes y un después en su monótona y aburrida vida. Poco a poco, sin quererlo, esta joven de silueta delgada, cabellos morenos y mirada pícara atrapará sin remedio en un círculo vicioso al inocente y ávido de nuevas experiencias al nuevo presidente del
Roman Club.
Un club que nació con el propósito de investigar y verificar los mitos que existen en el mundo, ya sea extraterrestre o paranormal. Todo visto desde el corazón de un niño. Actualmente el club está integrado por el ex-presidente del club y único miembro que no es del primer año, retirado de su puesto por haber roto una de las reglas sagradas de la asociación: mantener la virginidad. Es un puro fetichista de los culos.
Kattsun, o “cara de pulpo” como suelen referirse en más de una ocasión a él, es un voyerista y fetichista de las tetas pequeñas.
Tacchan, pequeño, reservado y cobarde fetichista de las piernas que no suelta por nada del mundo a su pequeña muñeca
Aimu.
No será solo
Hideo quien vea truncada su rutinaria vida escolar, ya que el resto de miembros del club verán alteradas con la incorporación de féminas al club, algo que nunca se había dado el caso desde que fue fundado. Al poco tiempo se le unirá también
Kyoko, una chica de cabellos decolorados, piel tostada, gran busto y de gran temperamento. Estas dos nuevas integrantes entrarán como una brisa de viento renovando el aire cargado de la cabaña del
Roman Club.
Tú eres el motivo por el que existoHideo es perfeccionista en cuanto a su ideal de chica ideal. Tiene una idea muy definida sobre lo que debe tener una chica para que cumpla su percepción de belleza. Esto ligado a su timidez hace que no exprese sus gustos u opiniones como lo haría cualquier adolescente entrado ya en la pubertad. Ninguna de las chicas de su alrededor le llaman la atención, pero eso no quiere decir que no le gusten las mujeres.
Tampoco ayuda a su situación el que pertenezca al
Roman Club, asociación tildada por el resto del alumnado de “raros”, practicantes de ocultismo, fetichistas redomados y buenos para nada. Una losa que empieza a pesar demasiado para sus débiles hombros.
No cabe duda de que necesita un cambio de rumbo en su insípida vida y esta llega en forma de mujer.
Kurumi Sahana acaba de ser transferida a la escuela de
Hideo y para más inri acaba sentándose al lado de el. Ella cumple todos sus cánones de belleza, tiene un tipazo, piel de una muñeca de porcelana y además es encantadora. No puede creerse que alguien así le este hablando y le dedique una sonrisa.
Pero no nos dejemos engañar por ella tal como ha hecho
Aiba. Sus ojos encierran un espíritu maduro, juguetón y cargado de experiencias, quizás oscuras, que no exterioriza ni rompen su imagen de niña buena. Pronto el ingenuo
Hideo será testigo de como se las gasta
Kurumi Suzuhara.
Sin saber porque
Kurumi se ha fijado en él,
Hideo irá cayendo prendido en los encantos de su diosa. No entiende porque una chica popular como ella se relaciona con él y encima pasa a formar parte del club que preside. Pero lo que no se espera es que entre ellos dos crecerá una relación especial, tan especial que no será para nada normal.
La joven chica comenzará a jugar con el, no de forma aprovechada. Sino para divertirse y desde un punto de vista inocente. Una serie de juegos donde entra en acción la sensualidad, la excitación, la provocación donde la batuta la lleva la chica y el chico simplemente obedece y acata las órdenes de su ama. Momentos eróticos que van creciendo en intensidad según se van sucediendo y que surgen de la manera más imprevisible pero que nunca acabarán en un clímax o en un final feliz. Ella se lo deja desde un principio bien claro: “
Por más que llores y supliques, nunca dejaré que te corras”.
Estos encuentros cargados de sensualidad haran que
Hideo genere una dependencia casi enfermiza por
Kurumi. No podrá quitársela de la cabeza. Aun sabiendo que nunca podrá tenerla no es un problema por el momento para el. Le es suficiente el tenerla a su lado, poder hablar con ella, tocarla olerla y acariciarla. No necesita más por el momento.
Pero el pobre chico enamorado es consciente de su situación. Sabe que nunca será suya y se pregunta si será el único al que le hace estas cosas. El es especial para ella? Es consciente que el único dependiente de los dos es él, él le pertenece y esto le angustiará. Tendrá miedo de que la relación que mantienen se rompa o que ella se canse de él y le deje trapo como un pañuelo usado.
“detener el momento antes de…”Sundome es una montaña rusa de sensaciones en la que se acaba de embarcar un joven de 15 años inexperto que descubrirá el mundo de su sexualidad de la mano de la enigmática
Kurumi. Una sucesión de experiencias que van desde lo sensual hasta en algunos casos hasta lo bizarro, un juego donde solo juega uno, él, y otro mira, ella. Encuentros que irán volviendo posesivo y dependiente a
Aiba.
A pesar del nivel que van tomando las escenas subidas de tono según va profundizándose la relación entre la pareja protagonista, estas se verán desde los ojos inocentes de un adolescente. No será necesario el uso de escenas de desnudos integrales, ni poses eróticas ni recursos pornográficos para provocar a
Hideo. Al principio bastará solo con un botón de la blusa desabrochado, una camiseta ajustada que deje marcada las líneas de los pezones o simplemente la clavícula desnuda para excitar a joven adolescente, pero estos momentos irán creciendo en intensidad y perversión pero sin sobrepasar los límites de lo pornográfico.
Seremos testigos de como
Hideo va madurando y creciendo personalmente, aunque no de la mejor manera posible. Gracias a su devoción por
Kurumi será capaz de superar sus límites y dejará atrás sus miedos con tal de complacer a su diosa. También seremos testigos de como su atrevimiento se hace más fuerte y se atreverá a cumplir con cualquier orden o misión que le encomiende
Kurumi, desde dejar que le disloquen el hombro, escaquearse en mitad de clase para comprar un refresco, llevar unas esposas durante toda una tarde y otras situaciones más insólitas.
Aunque la orden que le impone
Kurumi a
Hideo que más le marcará en será la de no poder masturbarse sin su autorización. Norma que hará que le veamos en más de una ocasión llorar y más salido que el pico de una plancha y que a duras penas conseguirá cumplir. Causa de que le veamos en muchas ocasiones con la “tienda de campaña levantada”. Toda una muestra de sumisión de este con ella. Esto hará que veamos al pobre muchacho capaz de realizar los actos más degeneradas y denigrantes inesperados por un muchacho tan tímido y reservado como él.
Aunque el peso narrativo y argumental se centre en la relación especial que mantiene la pareja de adolescentes,
Sundome ofrece más cosas. Hay que recordar que no son los únicos protagonistas de la historia. No hay que olvidarse del resto de los miembros del
Roman Club. A cada cual más especial, todos ellos ofrecerán momentos cómicos y divertidos que nos alejarán un poco de la relación enfermiza del protagonista.
A través de las actividades del club iremos conociendo más a cada uno de los integrantes de la asociación. Ya sea de excursión en busca de ovnis o espíritus seremos testigos de cómo cada uno de ellos van abriendo su corazón hacia los demás y son testigos de momentos y sucesos que arrancarán al lector más de una sonrisa. Acabaremos echando de menos que el autor no profundice más en sus vidas.
Dejando a un lado el argumento y entrando en el acabado artístico,
Sundome no presume de tener un dibujo muy vistoso y elaborado. Sus viñetas suelen contener fondos planos y con pocos detalles. Los diseños de personajes son de líneas simples y expresiones poco complejas a excepción de la pareja de protagonista, que pueden presumir de una elaboración mayor con respecto al resto de personajes. Las escenas cinemáticas carecen de fuerza y resultan bastantes planas. No es el fuerte de Kazuto Okada. Tampoco es mucho problema este punto ya que los momentos de acción no predominan mucho en la obra. Donde si ha puesto todo su esfuerzo es en las escenas de mayor expresividad e intensidad de
Kurumi, cuando la chica toma el protagonismo y el peso de la viñeta con un acabado más trabajado y detallista ya sea con en su mirada o en una pose sensual.
AutorKazuto Okada, mangaka nacido en la ciudad japonesa de Yamagata, es el autor de este título. Especializado en historias de corte adulto, en muchas de ellas predomina el contenido “ecchi”, ha desarrollado la mayor parte de su trabajo en la revista
Young Champion de la editorial
Akita Shôten.
No sería hasta 1995 cuando debutara como profesional, y de la mejor forma posible, con una serie de larga duración en las páginas de la revista
Young Champion.
Kyoukasho ni Nai!, título de la obra, narra la convivencia entre un maestro de instituto y una de sus alumnas que se ven obligados a vivir bajo el mismo techo. La serie finalizó con un total de 18 volúmenes y obtuvo el premio de ser adaptada al anime en forma de una serie de OVAs. Cuatro años más tarde comenzaría una historia corta de temática deportiva y de cierto carácter
ecchi titulada
Joubutsu Shimaseu y editada por
Sony Magazines. La obra fue recopilada en Japón en un único volumen.
En 2002 regresaría a la
Young Champion con dos obras cortas, ambas recopiladas cada una de ellas en un único tomo.
Tenshi ja Nai!, una comedia picante donde un estudiante de secundaria pervertido vende su alma a una demonio. La segunda sería su primera incursión en el manga
shônen a través de una historia que gira alrededor de dos amigos de la infancia y un amor no correspondido. La obra lleva por título
Chichin Pui! y no cuenta con un final. Al año comenzaría su segunda obra larga,
Hop Step Jump!, que contaría finalmente con 9 tomos recopilatorios.
Sería ya en 2006 cuando comenzase a publicar en la revista de
Akita Shôten la obra que tenemos entre manos,
Sundome. Serie recopilada en 8 volúmenes y que contaría más tarde con una adaptación a
live-action en forma de 4 capítulos.
Sundome es la única obra de este autor que ha llegado a nuestras tierras.
Su último trabajo publicado es una historia adulta titulada
Ibitsu que gira alrededor de
Madoka Moritaka, una chica de tendencias sádicas que abusa de un muchacho virgen llamado
Keigo Kakiguchi. La serie comenzó su publicación en la
Young Champion y finalizó con 7 tomos recopilatoios. El manga tuvo una adaptación a película de imagen real dirigida por
Toshiyuki Morioka.
EdiciónSundome llegó a las librerías españolas a manos de
Editorial Ivrea en la primavera de 2012. Lo hizo con la típica edición con la que suele publicar su títulos
shônen la editorial. Tamaño de 130 x 180 mm, con sobrecubiertas y páginas en blanco y negro. Únicamente encontraremos
páginas a color al principio del
segundo volumen y en forma de portadilla introductoria para la la sección de las
Aclas.
Ivrea vuelve a apostar por la calidad en sus ediciones y
Sundome es testigo de ello.
La edición española se mantiene fiel a la edición japonesa, conservando la portada original con los mínimos retoques en cuanto a la tipografía del título. La traducción corre a cargo de
Marcelo Vicente, asiduo ya en las publicaciones de la editorial. Su trabajo es correcto y a pesar de escenas subidas de tono y alta carga de erotismo y porque los diálogos pertenecen a adolescentes el vocabulario no es soez un vulgar.
ConclusiónTras haber catado los cuatro primeros tomos de
Sundome he de reconocer que no se trata de una historia habitual y que desprende de sus páginas un toque especial que lo hace diferente con otras obras de corte adulto y erótico que se hayan publicado en nuestro país. Una mirada adulta y serie que recorre página por página esta obra que nos hace adentrarnos en el mundo que encierra la seducción y la sexualidad. Un drama que sabe conjugar correctamente con momentos de humor y escenas distendidas que harán una pausa entre las escenas privadas y de mayor intensidad en entre los dos jóvenes protagonistas.
A pesar del dibujo de Okada, el devenir y desarrollo de la historia no se ven afectadas. Puede que cueste acostumbrarse al dibujo en sí, pero el lector acabará por acostumbrarse a el según vaya avanzando las páginas y los tomos. Sundome ha resultado es ser una opción a considerar para aquellos ávidos de nuevas historias que profundicen en las relaciones humanas y que huyen de las típicas historias banales.
Lo mejor:- La fluidez con la que se desarrolla los acontecimientos.
- La relación especial que mantiene la pareja protagonista.
- No hay sitio para el tabú.
Lo peor:- Una periodicidad más regular en su publicación al estar ya concluida.
- El dibujo que no puede ser del agrado de muchos.
- Falta de un mayor peso de los personajes secundarios.
Ficha Técnica:Título: Sundome
Título original: Sundome (すんドめ)
Guión: Kazuto Okada
Dibujo: Kazuto Okada
Editorial japonesa: Akita Shôten
Editorial en España: Editorial Ivrea
Formato: Tomo B6 (130x180), rústica (tapa blanda) con sobrecubierta
Precio: 8,00 €
Número de tomos en japonés: 8 tomos (cerrada)
Número de tomos en castellano: 5 tomos (en el momento de esta reseña)